Mi mejor dorada.

Por fin tengo algo digno de ser contado.
Llevo más de un mes sin escribir en el blog, y no porque no haya salido de pesca, sino que no he logrado capturas relevantes. Parece que toda mi buena suerte se acumuló ese día de primeros de octubre que saqué las 3 corvinas.
Desde entonces he salido varias veces por la misma zona intentando buscarlas de nuevo, sin éxito. Acabamos siempre entretenidos con el fino, sacando algunos besugos, corvas, sarguitos y otras especies.

He salido también en los concursos de pesca del CNRP, con buenos resultados.
Y hoy he vuelto a la zona de pesca, todo el días intentándolo con las corvinas, y alguna caña dedicada a una especie que me había puesto como objetivo esta temporada.
Al llegar, ya esta mañana comentamos las ganas de pillar una buena dorada, pues he estado leyendo últimamente a compañeros con bastante mejor suerte que yo. De hecho, mi mayor pieza hasta hoy era una de 2,5 kg en el Río Piedras.
Pero íbamos a lo que íbamos, 6 cañas al gordo, con 3 chocos y 3 caballas, y tan solo una para tentar a doradas y similares. Y fue esta última la que nos dio la sorpresa, un picadón, sacando hilo... pero después bastante más tranquila, de hecho pensé que sería más pequeña, incluso un buen sargo o borriquete.
Pero cuando la vimos, uffff...

Menuda pieza, vaya alegría. Casi los 5 kg. En mi peso, que no es digital, marcaba más de 4.7 kgs.
Se había tragado totalmente el cebo.

Al fin un buen día, el tiempo perfecto, la mar en calma,...