LOS ANZUELOS QUE SE LLEVAN LOS PECES.

En varias ocasiones me han preguntado los niños últimamente, si los peces que se llevan anzuelos clavados y escapan del pescador, acaban muriendo o no.
La respuesta es compleja, así que lo suyo es decir eso tan socorrido de,... DEPENDE.

Claro, los niños ya se saben la canción y responden DE QUÉ DEPENDE?

jeje

Pues esto viene a cuento porque el pasado sábado, en el Concurso de pesca de la ADN Nuevo Portil, capturamos una corvinata que traía un curioso regalito en la boca.

Un par de anzuelos inoxidables con mas de 1 metro de hilo, al que ya se habían pegado y crecido algunas algas, lo que indica que llevaba bastante tiempo clavado en el pez.
Tenía el anzuelo pequeño en el cielo de la boca, y el mayor clavado en la vejiga natatoria, y por increíble que parezca, nos entró a una caballa viva.

Podéis ver además que no estaba especialmente delgada. No parecía pues que le hubiese afectado mucho.

En otras ocasiones he levantado peces en los que he encontrado anzuelos incluso en su estomago, y como en este caso, no demostraban haber sido afectados de manera alguna.

Entiendo que cuando el anzuelo se lo tragan y tras varios minutos de lucha, el daño pueda ser irreversible. Pero cuando se clava en la boca del pez, o bien no hay lucha, parece que los peces son suficientemente fuertes para aguantar. Probablemente acaben incluso soltándose los anzuelos tras necrosarse y/o engrosarse el agujero hecho por el anzuelo.

Algunos amigos han levantado robalos que traían incluso señuelos artificiales con el triple clavado en el exterior de la boca del pez, y habían vuelto a comer.

En otra ocasión, capturamos por error una tortuga que también traía anzuelos clavados y mucho hilo enrollado en una de sus aletas.

En definitiva, la respuesta está bien clara: DEPENDE.