Este verano, en una de esas salidas en las que volví casi de vacío, el barco vecino, Kraken, con Luis y Peti a bordo, sacó una hermosa dorada.
Capturé el momento de sacarla con varias fotografías que os muestro a continuación.
En la que peor sale, pues me moví por la olas, solo se aprecia la cabeza de Luis, dando el grito de alegría tras la captura ;-)
A ver si se repite más a menudo, que ahora es buena época.
Hola Juan.
ResponderEliminarYa lo creo que se te movio la camara,no es facil sacar fotos y encima de un barco peor,muy bonitas las doradas,haber si la prosima salida coges tu alguna,suerte.
Un Abrazo.